Por: Guadalupe Taborda Goldman y Mailen Maradei
Tras el estreno de El hombre que perdió su sombra en la Sala María Guerrero del Teatro Nacional Argentino –Teatro Cervantes, las directoras Eleonora Comelli y Johanna Wilhelm contaron su experiencia sobre la obra, la relación entre el cuerpo y la sombra, el diseño audiovisual que intervienen en la puesta.
Dos artistas que vienen trabajando las sombras desde diferentes disciplinas, una desde las artes visuales y otra desde lo escénico, se unieron para crear un universo de sombras con una estética visual. Se trata de la coreógrafa y directora Eleonora Comelli y la diseñadora e ilustradora Johanna Wilhelm quienes presentaron El Hombre que perdió su sombra en la Convocatoria de proyectos teatrales dirigida a niños y niñas para la programación 2018 del teatro.
Esta adaptación libre de los cuentos “La Maravillosa Historia de Peter Schlemihl” del poeta alemán Adelbert Von Chamisso y “La Sombra” de Christian Andersen, relata la historia de Peter, interpretado por el actor Santiago Otero Ramos, quien inicia un viaje donde se encuentra con fantasmas y espectros. En esta travesía, conocerá a Fanny –personaje interpretado por Griselda Montanaro-, de quien se enamorará. Para poder ingresar en su mundo, perderá hasta su sombra.
A través de sombras proyectadas en dos pantallas que dividen el escenario de la Sala María Guerrero, la obra va construyendo un relato sincronizado entre los movimientos de los actores, la música en vivo de Axel Kygier y Alejandro Terán y el diseño audiovisual con retroproyecciones, una parte fundamental que acompaña la trama. “Algunos de los conceptos del espectáculo están definidos en el guión pero trabajamos en simultáneo mientras fuimos armando y ensayando la obra. Primero surgió la música y después hubo que adaptar cosas visualmente, priorizamos ver lo que rendía detrás de la pantalla”, señaló la diseñadora Johanna Wilhelm, quien viene trabajando con la retroproyección en espectáculos de música en vivo pero siempre con una dosis de improvisación. En ese sentido, la coreógrafa Eleonora Comelli acotó: “Fuimos equilibrando los elementos de la puesta para generar lugares protagonistas… Para armar la coreografía, fue muy importante el trabajo con los intérpretes. La propuesta de ideas y la experimentación fueron los pilares fundamentales del trabajo con ellos.”.
Durante la representación, van desfilando personajes que ayudarán a Peter a recuperar su sombra y otros que no. El protagonista se encuentra con el Hombre de Gris –interpretado por Sebastián Godoy, perteneciente al grupo de artistas y comediantes Los Blá- Blá, quien aporta humor a la obra– que le propone intercambiar su alma por un cofre de riquezas. Aquí, se entrecruza el mensaje que se repite como leitmotiv durante toda la obra; la división entre el cuerpo y el alma, idea tomada del romanticismo, y la idea del doble, tema recurrente en todas las puestas de Eleonora Comelli, y en esta también. “Cualquier cuerpo proyecta sombra si hay una luz que lo ilumina. Tener una sombra sobrepasa lo humano y refiere al universo fantástico“, explicó la coreógrafa y directora teatral sobre la importancia de la sombra. “Todo el tiempo que estuvimos trabajando con esta obra nos cuestionábamos qué es la sombra, qué es alma, si son el reflejo de los cuerpos. Filosóficamente, me parece que estas preguntas no tienen respuesta, la sombra y el alma son conceptos que se desprenden de uno pero que tienen que ver con lo interior”, reflexionó Johanna Wilhelm.
El proceso de creación de El hombre que perdió su sombra se nutrió de voces especializadas que brindaron su aporte. Las directoras subrayaron la colaboración dramatúrgica y actoral de la dibujante e ilustradora Isol Misenta, que interpreta la voz de Fanny, y comentaron la participación de otras voces que sumaron ideas. “En los agradecimientos, incluí a un maestro que, cuando estaba investigando sobre cómo hablar de las sombras, aportó ideas para el final del espectáculo. En el libro de Von Chamisso, Peter nunca recupera su sombra entonces me pareció que el personaje merecía una segunda oportunidad por eso decidí cambiarlo”, comentó Comelli.
El hombre que perdió su sombra se presenta los sábados y domingos a las 15 horas desde el 19/05/18 hasta el 19/08/18 en el Teatro Nacional Argentino – Teatro Cervantes, Libertad 815 – CABA. En vacaciones de invierno de miércoles a domingo a las 15 horas.
Con Pablo Fusco, Sebastián Godoy, Griselda Montanaro, Santiago Otero Ramos, Gastón Exequiel Sánchez
Músicos en escena Axel Krygier, Alejandro Terán
Retroproyectistas en escena Gisela Cukier, Johanna Wilhelm
Producción Francisco José Patelli
Asistencia de dirección Vanesa Campanini
Asistencia de escenografía Martina Nosetto
Colaboración dramatúrgica Isol Misenta
Coreografía Eleonora Comelli, con colaboración de los intérpretes
Música, canciones y dirección musical Axel Krygier
Iluminación Ricardo Sica
Vestuario Paula Molina
Escenografía y proyecciones Johanna Wilhelm
Dirección Eleonora Comelli y Johanna Wilhelm
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